Hoy me quede en casa todo el día, salvo el salir a dar la vuelta de rigor con el perro.
Cuando me quedo en casa recibo más información de la normal que me brinda el periódico que leo casi a diario, pues o leo mucho de Internet o veo las noticias de la tele, aunque la odio, al mediodía. No se porque cuando me quedo en casa todo el día necesito información como si mi espacio vital próximo fuera una burbuja aislada del mundo.
Neuras a parte, porque esto si es una neura.
Hoy veía las imágenes el maremoto en el suroeste Asiático, y me quede impresionada.
¿Porque siempre parece que las cosas se ceban con el que menos tiene?
22 mil muertos, y no se cuantos desaparecidos.
Se que contra la madre naturaleza no se puede hacer nada, pero no dejo de pensar en los frágiles que somos todos.
Vivimos en un planeta posiblemente magnífico (no conozco otro). Pero somos tan pequeños.
A veces cuando estoy en aglomeraciones de gente como en la Puerta del Sol en navidad, pienso cuanta gente “normal” cuantas historias. Somos tantos y pasamos inadvertidos unos de otros cuando caminamos.
¿Valoramos sinceramente nuestra vida?
Después no deja de venir a mi cabeza la locura de mundo en que vivimos. Unos que se matan en una guerra por las órdenes de sus gobernantes que dicen defender la libertad.
Otros que ponen bombas en nombre “de su Dios”, matando al que quiere vivir, (¿se darán cuenta que el Dios es el mismo para todos?)
Y de repente pasan cosas como la del terremoto, donde muere tanta gente.
Esto no se puede evitar, pero las otras muerte si.
¿Encontraremos alguna vez la manera de evitarlas?
Decía Rojas Marcos que la realidad era muy dura, que el hombre activaba mecanismos mentales inconcientes para aliviarla, sino nos volveríamos todos locos si viviéramos 100% en la realidad por mucho tiempo.
¿Qué mecanismo mental puede aliviar la realidad de ver morir en 1 hora 22 mil personas?
Yo por ahora no encuentro ninguno, pero seguro ya aparecera.