Hace ya casi 15 años que alguien tomo la dedición en tráfico que la mejor manera de matizar la velocidad en carreteras fuera de la ciudad era poniendo rotondas.
Con los años han proliferado por todos lados. Cada km o un poquito más aparece una rotonda sea donde sea.
Bueno hasta ahí todo bien, puede que hayan logrado lo que querían aunque lo que veo todos los días es algo distinto.
A los conductores parece que cuando van a sacar el carné, no les enseñan a todos, que:
1-Antes de entrar en una rotonda hay que parar y ver si viene alguien. No hay que meterse a la misma velocidad que se viene, son para aminorar la velocidad o cambiar de dirección.
2-Los que ya están dentro de la rotonda, deben indicar con su intermitente en que salida van a tomar, así el que quiere entrar sabe si puede pasar o no.
Es increíble ver, como nadie hace caso de estas dos reglas básicas o casi.
Existen algunas rotondas que son puntos negros para los coches y no pasa semana, que uno si pasa a diario por alguna, no vea un accidente o alguien rellenando un parte por el golpe.
Cada vez que tengo que acceder a alguna de las que me tocan donde voy generalmente sinceramente me da miedo, porque entre la velocidad que vienen dentro de ellas y que no sabes para que lado van a ir porque no ponen el intermitente, no sabes que hacer.
Bueno el intermitente esta peleado con mucha gente, porque es casi normal cuando uno va por una autovía, que el de adelante ni lo ponga para cambiar de carril, pero ese es otro tema.
Tenemos que reciclarnos todos en el conducir, sino esto cada día va a mas. No me extraña que si hay 100 accidente halla 140 muertos, aunque luego de todos los años que vivo aquí me sigue poniendo los pelos de punta la estadistica.