¿La casualidad es el camino?

Justo ayer hablaba con unas amigas mientras nos tomábamos un super gintonic de Bombay Shapier, como debe ser, en una terracita junto con la brisa que nos dio un respiro del calor de los últimos días, que parecía estábamos en la gloria. Esos encuentros, donde las circunstancias hacen que tú abras tu corazón y se juegue con la complicidad.
Hablábamos de mi post de días pasados, donde pedía que me contara alguien las técnicas de ligue actuales.
Ceci me proponía soltarse el pelo y ser uno mismo. Los demás estaban tan verdes como yo.
Creo que el problema básico no es ligar en si, porque eso requiere que se den ciertos factores, como química, atracción, etc.
El problema, y quizás mi pregunta anterior estaba mal formulada, sería ¿Dónde encontrarte con gente donde existiera la posibilidad remota de entablar una relación sea del tipo que sea?
Uis, creo que di en el clavo.
Leyendo blogs amigos, leo a Duende Maldito y dice textualmente:
“Había llegado a su vida por casualidad, que es la única manera en que nos llegan las mejores personas. Te toman por asalto, te hacen piquetes en el corazón y te formatean el cerebro haciendo que sólo pienses en ellas.”
Y pienso, la casualidad?
Creo en la casualidad, es más le presto atención, me divierte.
Pero, tendremos que esperar que las leyes de las casualidad, si es que las tiene, pasen a formar parte de la situación para conocer a alguien interesante?
Bueno, seguro es una variable más, pero no podemos esperar que sea la única.
¿Dónde? Es la pregunta, que posiblemente nos hacemos todos.
Alguna vez lei por ahí, que el 40 % de la gente encontraba sus parejas en el trabajo.
Yo me parto, pues en mi caso, mi trabajo es tan distinto a mi vida privada, que parece que no cuadra una cosa con la otra. En el mundo en que me muevo laboralmente, es el día y la noche con lo que quiero o me gusta. Para mi es solo un medio de vida, si bien trabajo en lo que me gusta, aunque no me vuelva loca.
De solo pensar que pueda encontrar una pareja en mi mundo laboral me pone los pelos de punta. A mi trabajo le falta lo que ahora se llama “glamour”. Bueno digamos que la construcción de glamour no tiene na de nada.
Cuando empecé a trabajan me plantee dos caminos, o el arte (que no da mucho de comer obvio) o lo que hago. Menudos polos opuestos. Siempre me quedo la posibilidad de trabajar en lo que hago que me permite vivir y no me quejo, y el arte como hobbie, que siempre lo he desarrollado.
Pero volviendo a lo que decía antes, no me imagino encontrando pareja en la construcción. Es más, llevo muchos años en esto, y nunca he conocido a nadie interesante. Sacando algún almuerzo con alguien cojonudo de los cuales sales diciendo, que persona fantástica, no he tenido nada más.
Así que mi conclusión es, esperar el encuentro casual que te remueva todo o sentarme a fumar un cigarrillo. Menuda perspectiva.

5 comentarios en «¿La casualidad es el camino?»

  1. Tenemos que acostumbrarnos a los nuevos modelos familiares. Las familias monopersonales también son una opción, la gente que es autosuficiente no necesita a nadie más toda su vida.
    Aunque somos seres gregarios, y necesitamos como las ovejas pertenecer a un rebaño, lo del rebaño de dos es totalmente artificial, e impuesto por la sociedad.
    Necesitamos a la gente, como necesitamos de vez en cuando un meneito, pero no existe esa media naranja que cumpla el 100% de nuestras necesidades emocionales, porque éstas van cambiando a lo largo de la vida.
    Hay que encontrar a alguien que cumpla el porcentaje más alto, pero el 100%, creo que es imposible.
    Digo yo..

  2. Ceci estoy de acuerdo del todo contigo en lo que dices. El 100% es imposible e irreal.
    Pero aunque con imperfecciones toparte con alguien que comparta aficiones o cosas. Y hasta esto es a veces muy dificil.
    Yo me hago eco de lo que escucho decir a mucha gente sobre el tema, ya se que a mal de muchos consuelos de tontos, pero creo que es generalizado.
    en fin.. esperaremos que la casualidad haga acto de presencia, sino seguiremos siendo monoparentales que tampoco se esta mal 🙂

  3. Ningún sentarse a esprar, milady… si bien creo en lo que digo, también siento que a la casualidad hay que ponerle una pizca de “causalidad”. Depende de nosotros darle la oportunidad a la casualidad. Hay que salir al sol, Reina.
    Un beso y gracias.

  4. Duende, nunca sentarse a esperar, pero tampoco esperando nada en lo que se hace.
    asi si las leyes de la casualidad como tu dices funciona, la sorpresa sera fantastica.. 🙂

  5. Pues yo pienso que estas cosas aparecen donde menos te lo esperas y el día menos pensado. No hay que sentarse a esperar, sino seguir viviendo la vida y si un día llega pues bienvenido sea.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *