Llevo 56 horas sin tabaco y me estoy subiendo por las paredes.
Estoy intentando dejar de fumar, luego de mi relación tortuosa con la nicotina este ultimo año y medio.
Luego de haber estado 5 años sin fumar, el haber vuelto no tiene nombre, pero a veces las relaciones prohibidas son así.
Ahora me lo he propuesto, no por las leyes antitabaco que están por implementar, donde más fumo es en casa y aquí nadie me dice nada.
Sino porque al volver del crucero, no se si recuerdan, estuve con bronquitis. Ahora como dicen los médicos, la tengo mal curada por culpa del tabaco.
Tengo una tos que no se me va.  Lo peor de todo y lo que me dio yuyo…fue.
El otro día sentada en el sofá del salón leyendo, en silencio total, de repente escucho otra respiración, un ruidito de respiración que me acojono.
Pero no era un fantasma, eran mis bronquios que hacían ruido al respirar como si tuviera un alíen dentro. Eso si, el alíen se estaba zampando como mínimo un habano del ruido que hacia.
Pos nada, la excusa perfecta para intentarlo.
El primer día no tenia cigarrillos en casa, y estaba medio loca, pero se que es psicológico, ya he pasado por esto.
Luego compre un paquete, que tengo cerradito en un cajón, cerradito para casos de emergencia.
He tenido varias crisis estos días, de las que uno se sienta y se fuma una cajetilla, una sobre todo con mi loca favorita.
Pero aun resisto. El saber que tengo esa cajetilla cerradita y guardada es como saber que se tiene las pastillitas en caso de crisis cardiaca.
Anoche tuve una cena con amigos, y no fume. También he tenido reuniones de trabajo donde todos fumaban, y nada.
Eso sí, tomo mucho agua que deben agradecer mis riñones, voy a pilates para sacarme el estrés, José te machaca de tal manera en la clase que no tenes ganas ni de agarrar un cigarro.
Cumplo con los requisitos, espero que este intento de separación definitiva surta efecto…sino tendré que contratar un abogado. Esta relación se tiene que terminar.