Pedi por esa boquita de piñon, niña.

Ayer salí de mi casa a las 8,3 de la mañana y volví a las 8 de la noche. Eso si, sin parar al medio día, o sea que se podría decir que trabaje casi 12 horas sin parar.
Hoy tengo que ir a una visita a las 3, o sea en mi hora de almuerzo.
No estoy dispuesta a seguir así, como antes.

He hablado con la jefa y le he propuesto dos soluciones.

Sobre la base de tomarme solo 1 hr. para comer, no dos…Igual eso hago hoy, muy pocas veces como en 2 horas.

1-Trabajar hasta las 6 y no las 7 de la tarde, o sea salir una hora más temprano.
2-Salir a las 7 pero no trabajar los viernes tardes. Así me quedaría una hora de más trabajada a la semana, pero como o a veces llego tarde o tengo que hacer algo compensaría.

En realidad busco un poco de flexibilidad.
Me lo contestan la semana que viene. Creo que la propuesta 2 tiene muchas posibilidades de salir adelante.
Ella sabe que si se necesita por algo quedarme o hacer algo especial, cuenta conmigo, pero si logro los viernes tarde, me encantaría. Me cunden mucho no trabajar los viernes tarde.

El que no llora no mama y el que no afana es un gil…dice el tango Cambalache, yo rectifico “El que no llora no mama y no consigue nada,, lo de afanar lo dejo para otro post.”

3 comentarios en «Pedi por esa boquita de piñon, niña.»

  1. Uys… tratandose de trabajo, yo como que paso… ya tengo bastante con lo mio…

    Ahora.. si se me permite, y se que estoy fuera de tiempo… voy a opinar sobre lo del descapotable… compratelooooooooooooo (y dame un paseito, plis)

    1beso

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *