No escribo el blog estos días por varias razones. Aunque una de ellas no es estar de vacaciones porque no las he tenido aun, pero si me he escapado al extrarradio para evitar las fiestas, cosa que ya conté y que ya terminó, porque estoy en mi casita nuevamente. Me preocupaban mis plantas con este calor, pero ya están bien.
Una el calor, que sinceramente hace insoportable pensar en algo.

Dos, no paro. Tengo tanto trabajo y sobre todo obligaciones, que hacer esto, que hacer lo otro, que sinceramente me saca las ganas de todos. Llego tan sin energía a la noche, que paso de todo incluido el blog.

Pero lo mejor, es que no tengo nada que decir.

Absolutamente nada. Es como si mi mente de repente haya dejado de divagar, de reflexionar sobre las cosas y la gente. En realidad me he dado cuenta que es tan surrealista lo que pasa en la realidad actual que nos engloba, que para que comentar más. Ya la comunicación, la prensa, los políticos, la calle en general, se encargarán de hablar del tema para rellenar hueco.

Ayer hice zapping por ej, en la tele a la tarde. Horario que no veo nunca por razones obvias. Y llegue a la conclusión que no me extraña que el programa más visto de la sobremesa sea un serial histórico español, porque las tertulias del corazón están insoportables. Que me importa a mi si Borja montó o no si iba a ser papá de nuevo? Entre eso y la eterna pelea de “Ambiciones” que sigue luego de tantos años, parece que en el mundo no hay otra cosa. En fin, ni siquiera se puede comentar lo que no tiene comentario posible, ni viable.

No sé. La ausencia de pensamientos y sobre todo de motivaciones para escribir en el blog, se deba también al cansancio o como creo, algo está cambiando en mi. Quizás esa verborragia mental que tenía antes que necesitaba por todos los medios ponerla en papel, este desapareciendo.

Alguien hace poco me dijo, “quizás no tenemos que pensar ni reflexionar tanto las cosas”. Puede que me haya quedado eso grabado en mi cabeza.
Pero no desesperes dear lector. Que estoy aquí, y el momento menos pensado me lanzo al ruedo nuevamente. Mírame al final, no tenía nada que decir, y escribí una página llenando el hueco mientras me tomo mi súper taza de café.

Cambiando de tema radicalmente, este año tampoco tuve mis gardenias florecidas. Algún botánico que lea el blog y me pueda aconsejar que hacer? El año pasado las pode, y las cuido con mimo para que en julio me den alguna flor, pero este año tampoco nada. En fin, ni esta alegría este verano. El último año que florecieron fué en 2007

Pd: Che Pedrín, vos ya tuviste tus vacas?