Ayer, justo Halloween ha pasado un misterio que no tiene explicación lógica y que nunca la tendrá. Como si las puertas entre mundo de hadas y la realidad se haya abierto y dado paso a algo increíble y sin explicación.
Os cuento.
El año pasado con Bea, decidimos comprar dos décimos de Dña. Manolita para navidad. Lo hicimos online, lo recibimos por mensajería y sin problema. Aunque no nos sacamos la lotería. La experiencia nos llevo a que este año, decidiéramos implementar la costumbre todos los años.
Compre yo dos décimos sin saber el número, al boleo como hacen muchos españoles luego de las dos o 3 horas de colas que hacen para comprarla en la tienda física. Evidentemente con el sistema online nos ahorramos las colas.
Ayer me puse a pensar que no los había recibido y ya había pasado mucho tiempo. Me puse a investigar . Tenia un par de mail sobre el envío, y lo raro fue que el último decía que los había recibido.
Luego del descoloco inicial, me dije “yo no los recibí”. Busqué el teléfono de contacto con la Administración de La Manolita, y al segundo intento lo conseguí.
Explique que no lo había recibido, y la señorita muy amablemente me dijo que iba a ver que había pasado. Desde ese momento se dio un día de locura. Llamados de ellos, de la agencia de transporte, y en todos no lo decían pero me tachaban de mentirosa porque según la agencia de transporte la persona que lo había recibido dio mi DNI verdadero.
Terminé por cabrearme. Y decir “vale, asumo la pérdida pero yo no los tengo. El verdadero problema lo tiene ustedes la Administración y la Agencia MRW que fue la que lo entregó, porque seguro no será el único caso y todo esto involucra robo, suplantación de identidad y sobre todo protección de datos. Porque alguien dentro de la agencia uso mi DNI de otros envíos. Porque yo no lo recibí”. Evidentemente siguen sin creerme. Es su palabra contra la mía. Y di el tema por terminado.
Hoy he recibió otra llamada de la Administración para preguntarme si la Agencia me había dado una explicación. Como seguimos en un dialogo de besugos. He propuesto que me digan el número y serie de los dos décimos que me mandaron y yo hare la denuncia de robo en la policía. Porque solo ellos saben los número que me mandaron y así, aunque no tenga los décimos físicamente pero si la denuncia, si sale premiado, la Lotería me daría la razón a mi. Hay antecedentes de casos similares.
Ya lo decía mi abuelo Juan José, “todos los números están en el bolillero, ¿y si toca?”. Juro que si me los dan la haré. Porque yo no los recibí.
Ha sido todo tan kafkiano que cuando volví del paseo del perro, revise mi reciclaje de papel, por si por equivocación lo había tirado con el embalaje de otro envío. Porque recibo envíos de MRW muchas veces. Pero no. No estaba.
Todo esto me deja la sensación de indefensión. El gasto son solo 40€. Asumible. Pero lo grave es que alguien rellenó mi número de DNI original. Ahí esta lo grave.
Misterio de fantasmas, no me digan. Y justo en Halloween.
Ahora solo esperar que me pasen el número porque los dos décimos eran del mismo. Y ha hacer la denuncia. Eso si, la costumbre de usar el online de La Manolita se acabó aqui. Que les den a la tecnología.
Esto quedará en los anales de los misterios sin resolver de mi vida. Que son muchos pero que quizás os contaré en otro post o quizás luego de 17 años ya los conté aqui y no lo recuerdo. Qué al final 17 años dan para mucho.